VIP
VIP
El proyecto VIP nació en el año 2005 cuando el artista Javier Vanegas empezó a coleccionar las tarjetas publicitarias de los burdeles de la ciudad de Bogotá. Vanegas se vio atraído por la curiosidad de que en estas tarjetas se vende la imagen de un tipo de mujer la mayoría de las veces ajeno al fenotipo colombiano (la fotografía se convierte aquí en herramienta de falseamiento). Se trata de pequeñas tarjetas con contenido sexual explícito usadas en varias ciudades del mundo como Las Vegas, Paris, Londres, Amsterdam, Buenos Aires, Paris, Madrid, Tokio, Ciudad de México, entre muchas otras. Esta forma de publicidad es mundialmente conocidas como tart cards o sex cards y tiene como objetivo principal la promoción de establecimientos que ofrecen servicios sexuales. Hasta la fecha la colección cuenta con un total de 3.500 tarjetas de diferentes motivos, con las cuales Vanegas (re)crea a manera de mosaicos, sirviéndose de un software, algunas de las obras más controversiales de la historia del arte; obras que fueron consideradas en su época como inmorales debido a su contenido sexual. Los mosaicos se crean a través píxeles de 1,5 cm por 2 cm, cada uno de ellos formado por una de estas tarjetas, de tal manera que la paleta cromática propia de la estética popular de las sex cards termina por ser uno con la gama de colores de las obras “originales”; lo popular, de alguna manera, se apropia de un arte que ha trascendido hasta lo icónico. A su vez, estos mosaicos cumplen la función de restituir las obras de arte antiguamente censuradas, dejando en evidencia el cambio en la forma en que nos relacionamos, hoy día, con la sexualidad. La obra de Vanegas busca evidenciar la magnitud del enorme negocio que existe en torno a la explotación del cuerpo humano, así como el abuso sexual que se da en estos establecimientos, encubierto por un halo de costumbre y normalidad. Así pues, VIP cuestiona la doble moral que maneja la sociedad contemporánea, teniendo en cuenta que es un mercado fomentado e impulsado por todos los niveles sociales.
Con su obra VIP, Javier Vanegas recontextualiza y explora la naturaleza indómita de las historias personales, sexuales y sociales, al mismo tiempo que cuestiona la estabilidad de nuestras nociones socialmente instauradas, mediante el empleo de iconografía pictórica; imágenes en flux y permutaciones de ensamblaje. Recopilar, retener y reencausar. Vanegas crea un universo nuevo de prosa “erótica” e imágenes pixeladas que ha sido construido a partir de más de nueve años recolectando tarjetas promocionales de servicios sexuales y entretenimiento para adultos en la ciudad de Bogotá. La obra sugiere un intercambio dinámico con una tendencia revisionista de orden del más alto; es el marcador del lugar para nuestras experiencias e implica confianza activa en la mutabilidad del universo, del cuerpo, la sexualidad y la imagen; un orden en el caos y la voluntad de predicar con el ejemplo de los pioneros que exploran géneros fronterizos.
Juan Gabriel Zorrilla